Es uno de los resultados de Plastic0Pyr, que ha estudiado durante dos años la contaminación y sus efectos en organismos y ecosistemas de los Pirineos, y que presentó sus resultados en un congreso. Existe una clara relación entre el grado de urbanización y actividad turística en zonas adyacentes a los ríos de montaña estudiados, y la cantidad y tipos de residuos plásticos encontrados.

Los peces de lagos y ríos pirenaicos en Andorra, Francia y Cataluña, tienen microplásticos en sus intestinos, hasta 50 fragmentos en algunos casos, lo que implica una posible transferencia trófica. El dato, revelado por el proyecto Plastic0Pyr, confirma que los ecosistemas de montaña no escapan a este tipo de contaminación. De hecho, tal como revela el mismo proyecto, el río Ter aguas abajo de la estación de esquí de Vallter 2000 es uno de los puntos más contaminados por número de residuos plásticos encontrados en muestras de peces.

“Existe una clara relación entre el grado de urbanización y actividad turística en el ambiente adyacente a los ríos de montaña estudiados, y la cantidad y tipos de residuos plásticos encontrados”, explica Helena Guasch, investigadora del Centro de Estudios Avanzados de Blanes del CSIC, y coordinadora del proyecto.

Los efectos llegan incluso a los microorganismos

Joan Artigas, de la Université Clermont Auvergne (Francia), indica que se han visto diferencias significativas en el crecimiento y la biodiversidad de microorganismos de sustratos naturales, como la hojarasca o la madera, y los de plásticos y bioplásticos que pueden acumularse en los ríos de montaña. “Las interacciones entre estos microorganismos cambian dependiendo de si crecen sobre sustratos plásticos o bioplásticos”, lo que podría afectar al funcionamiento y la diversidad de las comunidades de microorganismos.

El proyecto Plastic0Pyr ha estudiado durante dos años el impacto de esta contaminación en lagos y ríos pirenaicos, así como estrategias para reducirlo. Finalizado el proyecto, los resultados fueron presentados hace unos días, en un congreso en Setcases (Girona), a representantes de la administración local y regional, empresas, entidades deportivas, universidades y centros de investigación. También se presentaron propuestas de economía circular y de implicación ciudadana para minimizar su presencia e impacto.

El consorcio del proyecto Plastic0Pyr está formado por centros de investigación y entidades de Francia, Andorra y España, como el Centre d’Estudis Avançats de Blanes (CEAB-CSIC), las universidades de Barcelona (UB) y Girona (UdG), la Université Clermont Auverge, el CNRS-Ecolab y las empresas Anthesis Lavola y Cicloplast. También son socios del proyecto la Agència Catalana de Residus, la Agència Catalana de l’Aigua, el Gobierno de Andorra, el Instituto Pirenaico de Ecología (IPE-CSIC), la Agència Catalana de Residus y el Ayuntamiento de Setcases.

Hay concienciación medioambiental pero los hábitos no han cambiado

El proyecto también ha abordado la problemática desde la vertiente económica y social. En este sentido, equipos de la Universidad de Barcelona y de Anthesis Lavola han entrevistado a más de medio millar de participantes. Las respuestas revelan que los plásticos de un solo uso, pese a la concienciación medioambiental de los usuarios, se siguen utilizando en actividades deportivas y lúdicas en los entornos de montaña.

Este equipo también ha realizado una ecoauditoría de los productos de un solo uso más utilizados, que, tal como explica Mónica Martinez (UB), “han resultado ser botellas de plástico, film transparente, bolsas de plástico y cajitas de cartón para comida rápida”. La ecoauditoría también estudia sus posibles alternativas (botellas de metal o vidrio, envoltorios reutilizables, bolsas téxtiles y reutilizables) para disminuir el impacto ambiental.

Modelos de negocio para reducir el plástico

Los equipos de Norma Bisbal, de Anthesis Lavola, y Luna Giraldo, de Cicloplast, han estudiado   opciones de negocio basadas en la economía circular y enfocadas a la reducción del uso de los plásticos de un solo uso. Conjuntamente con MinkaDev, han analizado los costes y beneficios, económicos, ambientales y sociales, en base a la legislación vigente y la que está próxima a ser aprobada, usando como escenario una estación de esquí de los Pirineos.

El modelo propuesto reduce el consumo de botellas de plástico mediante la venta o el alquiler de botellas de acero inoxidable reutilizables, la instalación de máquinas de ‘vending’ en la estación de esquí, así como de fuentes de agua filtrada alrededor de la instalación y puntos de recarga. El estudio demuestra que esta acción podría contribuir a una reducción progresiva de los residuos plásticos en el entorno, y que es viable económicamente a medio y largo plazo.

Ciencia ciudadana como herramienta científica y de integración social

Delfina Cornejo del CEAB-CSIC y Arantxa Arnaiz de Anthesis Lavola explican que la actividad de ciencia ciudadana Plastic0Pyr Switch, “que consiste en un conjunto de protocolos de muestreo para plásticos y microplásticos en ríos, es de fácil aplicación por la ciudadanía”.

Plastic0Pyr Switch ha sido aplicado por educadores y entidades culturales en cinco cuencas fluviales de Catalunya y Andorra. “La información recogida nos ayuda a los investigadores a ampliar el conocimiento sobre la presencia de residuos plásticos y microplásticos en los ecosistemas fluviales”, explican las investigadoras.

El congreso se cerró con una mesa redonda, moderada por Helena Guasch (CEAB-CSIC), ­­que contó con la participación de Gaël Le Roux, investigador del CNRS-Ecolab; Joan Casadevall, alcalde de Setcases; Mónica Flo, de la Agència Catalana del Agua; Arantxa Arnaiz, de Anthesis Lavola, y Eugenia Martí, investigadora del CEAB-CSIC.

Expertos y gestores reclaman una mayor implicación por parte de las administraciones regionales para gestionar y controlar la presencia de residuos plásticos en los ecosistemas de montaña.

“El volumen de residuos generados por el turismo de montaña es un problema de difícil gestión para los pequeños municipios de las regiones de montaña, que tienen que asumir un coste demasiado elevado para sus economías”, afirma Joan Casadevall. “Por ello, la implicación de administraciones de rango superior es fundamental”.  

Los residuos plásticos en los ecosistemas de montaña son un problema transfronterizo, con implicaciones a diferentes niveles administrativos y sociales, “por lo que son vitales enfoques multidisciplinares e implicando a diferentes agentes sociales, políticos y administrativos”, afirma Eugenia Martí, del CEAB-CSIC.

También, añade, “es fundamental el diálogo entre empresas de la región, entidades de excursionistas y federaciones deportivas, administraciones locales y regionales e investigadores en el ámbito de las ciencias ambientales para identificar problemas y proponer soluciones”.

Plastic0Pyr es un proyecto cofinanciado por el programa Interreg V-A Espanya-Francia-Andorra (POCTEFA 2014-2020).

Más información sobre el proyecto en: https://plastic0pyr.wordpress.com/

Plastic0Pyr / Comunicación CEAB-CSIC / Comunicación CSIC Cataluña

Instituto de Análisis Económico (IAE)

Un grupo de trabajo del proyecto Plastic0Pyr, en uno de las áreas donde se ha tomado muestras. Imagen: Plastic0Pyr.